LA PREHISTORIA EN URUGUAY
Por los estudios de los distintos yacimientos arqueológicos, suponemos que el hombre llegó a América hace entre 11000 y 13000 años. Este paradigma está cambiando hacia los 30000 años, pero en este momento, todavía existe un gran debate entre los científicos, (Miiotti, L., 2000). Lamentablemente la documentación existente de períodos anteriores a la llegada de los europeos es escasa para todos los grupos indígenas de nuestro territorio, algunos documentos esporádicos de viajeros, cronistas, soldados, descubridores, que son muy valiosos por ser únicos, no necesariamente veraces, de aborígenes que se vieron desde la costa.
“La prehistoria del Uruguay es un período amplio, complejo y variable…"(Consens) al que hoy llamamos río Uruguay, corría en el norte con apenas 20 mts. de ancho, en un amplio valle que se veía desde la elevada la orilla. Vientos … Nuestro almanaque indicaría que faltan aún mas de diez mil años para el nacimiento de Cristo..
A lo largo de miles de años, distintos grupos fueron habitando este territorio. …. Que llegó a tener áreas desertizadas en el noroeste hace 7.000 años, con extensos arenales en los que se desplazaban llamas y guanacos. Y que poseyó importantes bosques semi-tropicales en su región central, apenas tres mil años después. El océano cubrió -nuestras hoy turísticas playas-, sumergiéndolas bajo seis metros, para retroceder en otros momentos, dejando mas de 70 a 100 km. de nuevas costas…Un panorama cambiante en lo geográfico y en lo climático. Casi siempre sorprendente, y en el que los aborígenes tuvieron un extraordinario rol: adaptarse a dramáticos cambios de flora y de medio ambiente, en los que no sólo sobrevivieron, sino que desarrollaron además variadas y complejas relaciones sociales y culturales. Todo ello, junto a una renovadora capacidad para inventar y para modificar herramientas.
A lo largo de miles de años, distintos grupos fueron habitando este territorio. …. Que llegó a tener áreas desertizadas en el noroeste hace 7.000 años, con extensos arenales en los que se desplazaban llamas y guanacos. Y que poseyó importantes bosques semi-tropicales en su región central, apenas tres mil años después. El océano cubrió -nuestras hoy turísticas playas-, sumergiéndolas bajo seis metros, para retroceder en otros momentos, dejando mas de 70 a 100 km. de nuevas costas…Un panorama cambiante en lo geográfico y en lo climático. Casi siempre sorprendente, y en el que los aborígenes tuvieron un extraordinario rol: adaptarse a dramáticos cambios de flora y de medio ambiente, en los que no sólo sobrevivieron, sino que desarrollaron además variadas y complejas relaciones sociales y culturales. Todo ello, junto a una renovadora capacidad para inventar y para modificar herramientas.
Sobre la costa del Uruguay y en las islas que quedaron hoy bajo la represa internacional de Salto Grande, las excavaciones permitieron hallar (entre otros fósiles) una gran cantidad de finos artefactos líticos (de piedra). Muchos demuestran una detallada técnica de manufactura y un gran conocimiento y manejo de los aspectos técnicos para obtener hojas bifaciales (o sea que fueron talladas en ambas caras) que tienen apenas 3 a 4 mm de espesor. Raederas que muestran en sus agudos filos, los daños producidos por su intenso uso hace mas de cinco mil años. Puntas de proyectil conocidas como "cola de pescado" (por su peculiar formato), que además de sorprender por su alta precisión técnica, son indicadoras de remotas tradiciones que van mas allá de los ocho mil años de antigüedad."
Muestras de diferentes tipos de puntas de flechas de distintos departamentos de la República, parte de la Colección Tadei, salvo la más pequeña, que es un microlito encontrado en la Barra de Valizas (Rocha) y pertenece a la Colección C. Mozo.
Podemos estudiar varios tipos de representaciones, las rupestres que se encuentran a cielo abierto, las parietales que se representan en paredes y techos de cuevas, algunas veces también en el suelo, y las muebles o mobiliares que son más pequeñas y se pueden trasladar, de allí su nombre. La Arqueología, y la Antropología buscan, información acerca de las características de las comunidades humanas que produjeron dichos objetos con representaciones gráficas.
En nuestro territorio hay dos regiones bien diferenciadas con respecto al arte rupestre: : al Norte del Río Negro, encontramos basalto y arenisca solicificada apta para grabar petroglifos por su grado de elasticidad, al Sur, granito, con la característica de que los vientos erosionan de forma tal la roca, que se generan paredes inclinadas dirigidas hacia el NW, formando un ángulo que deja expuestos paneles de piedra que fueron aprovechados para realizar las pinturas.
En general usaban hematita, material metálico de color ladrillo. El granito exuda una sustancia que forma una película protectora sobre las pinturas, eso hace que se preserven después de varios miles de años. Los investigadores de Chamangá y Maestre de Campo, suponen que los indios conocían bien este comportamiento de la roca y por ese motivo pintaban sobre ellas y no sobre otras. (Florines, A, 2000).
Las pinturas rupestres halladas, pertenecen a varios departamentos, todas ellas están realizadas sobre granito. Los afloramientos más conocidos son en Durazno (Maestre de Campo), Flores (Chamangá) y Maldonado (en el cerro Pan de Azúcar).
La otra manifestación rupestre importante en nuestro país, está distribuida al Norte del Río Negro, sobre todo en el departamento de Salto. Se trata de miles de rocas grabadas, llamadas petroglifos. Son grabados de tamaños variados, inscritos en afloramientos rocosos de todo el departamento de Salto y alrededores. Fueron descubiertos apenas hace unos quince años por un geólogo que estaba investigando afloramientos ; este descubrimiento tardío, nos indica que son muy difíciles de distinguir. Una de las investigadoras del equipo, Diana Rosete, ha verificado que la incidencia paralela de los rayos solares favorece su visualización.
Estos petroglifos se han identificado en otras áreas de la Cuenca del Plata, como es el norte de Argentina, Sur de Brasil y Chile. Los grabados descubiertos al norte de América del Sur pertenecen claramente a otras culturas.
Los petroglifos son grabados en piedra fabricados mediante técnicas combinadas de picoteado y pulido. Ellos representan un universo de elementos ideológicos y simbólicos. Cumplían una función determinada en el interior de la comunidad. El estudio de estos vestigios arqueológicos, permite una aproximación al conocimiento del comportamiento del hombre del pasado y cual era su forma de entender su mundo y relacionarse con el otro.
Se han encontrado hasta el momento 3.700 grabados rupestres en Salto en la localidad de Colonia Itapebíy Arroyo Valentín; estos grabados tienen una antiguedad de 4.300 años. Luego de una larga lucha por la preservación de este rico patrimonio cultural, en diciembre del año 2009 el Poder Ejecutivo declaró estos petroglitos Monumentos Históricos Nacionales, en dicha declaración se sugiere protegerlos en un radio de 400 mts,
Una buena noticia es que se ha puesto en marcha el proyecto de un Parque Arqueológico en Salto, con senderos, caminería y centros de interpretación para saber quiénes, cuántos, cómo y por qué se generaron estas manifestaciones rupestres. Estas acciones procuran promover una mejor comprensión de las poblaciones prehistóricas y lograr herramientas de valoración y preservación de los bienes patrimoniales.
Las pictografías son pinturas sobre la piedra, allí se puede apreciar las técnicas de grabado fino y la miniatura, utilizando pigmentos de la naturaleza, similares a los hallados en el norte de la Patagonia. Dichas técnicas son de carácter monocromático, en particular una variedad de óxido de hierro de color ocre rojo denominada hematita, la misma que empleaban para pintar su rostro y cuerpo o para decorar las pieles con que se cubrian. Este pigmento aparece también en las piezas de alfarería y en el arreglo de paquetes fúnebres. El pigmento mezclado con una materia untuosa era aplicada cuidadosamente con las manos y también con instrumento tipo pincel fino rígido y/o flexible, sobre los bloques de granito.
Los diseños de las pictografías como el de los grabados son trazos geométricos aislados, por ejemplo una línea y un ángulo. Aparece la simetría, líneas en zig zag, tal cual un ejercicio de caligrafía, impresiones de manos de jóvenes y de adultos y la figura humana también geometrizada.
Considerada una localidad rupestre, Chamangá en el departamento de Flores es una zona arqueológica que alberga la mayor concentración de restos de pictografías en Uruguay, más de 70, se ubica a lo largo del arroyo Chamangá y sus afluentes. Al igual que en la región norte se ha logrado el interés gubernamental y municipal para hacer conocer y respetar estas zonas rupestres; Existen caminos que llevan a estos lugares, estan señalizados por la Intendencia Departamental y se dice que es toda una aventura que bien vale la pena recorrer.
Pictogramas encontrados en el Arroyo de la Virgen. Departamento de San José (Uruguay). Decubiertos por Clemente Barreal Posadas en el año 1874
"constructores de cerritos" los pobladores prehistóricos de nuestro territorio que eligieron el litoral este desde Rocha en la Laguna Negra llamada el Ojo de Ulmá, pasando por Tacuarembó, sur de Rivera y comunicándose también con lo que hoy es Río Grande do Sul.
Dichos grupos humanos desarrollaron sus modalidades culturales a lo largo de más de 2000 años, alcanzando a convivir con los conquistadores, hasta comenzado el siglo XVII.
Los restos y vestigios culturales localizados en estos sitios arqueológicos ponen de manifiesto sociedades de relativa complejidad sociocultural. El elevado número de estos sitios estaría indicando una importante densidad demográfica y un sedentarismo mayor que aquel que nos contaba la historia hasta hace poco tiempo.
Las últimas investigaciones presentan una sociedad que ocupa y aprovecha en niveles máximos el medio ambiente del que dispone, economía de amplio espectro, con complejas pautas culturales que están demostradas en dichas construcciones y rituales dedicados fundamentalmente a la honra de los muertos. La magnitud de la construcción de los montículos funerarios, alcanza un volumen de 1900 cm3 de sedimentos acumulados entre 40m de diámetro y 3 m de alto, pero estas dimensiones son variadas, lo que indica las diferencias jerárquicas dentro del grupo. (Reelaboración y síntesis de los trabajos de : Lic. Mario Consens PETROGLIFOS del departamento de Salto, rocas grabadas Ma Noël García Simón y PETROGLIFOS EN EL URUGUAY : Leonel Cabrera Pérez)